María siempre había soñado con encontrar a alguien con quien practicar bondage o shibari.
Le parecía tan “kinky” que la sola idea de verse con un látigo, la hacía fantasear.
Pedro también era nuevo en el tema, a el no le emocionaba tanto pero pensaba que al fin y al cabo era coger y seria una buena historia que contar en alguna peda.
María odiaba planear las cosas, siempre trataba que sus encuentros sexuales fueran espontáneos porque así era más divertido. Sólo bastaba con llamar alguna noche entre semana y pedir verse con el plan de tomar unas chelas y los dos ya iban sabiendo lo que pasaría.
Luna llena y los estragos de la misma hicieron que no se pudiera contener a hacer la llamada.
-Que paso?
-Oye pedro, que vas a hacer al rato, porque no salimos por unas chelas, ya te toca dar tu tanda…
-Pues, estaba jugando x-box, pero va. Es luna llena verdad?
-No tienes ni que preguntar, nos vemos a las 10.
SHINJU – Las perlas
3 cuerdas cortas o una larga y una corta
1. Envuelve el tórax con una de las cuerdas, bajo los senos, manteniendo una presión constante. Anuda la cuerda en la espalda, a la izquierda de la columna vertebral.
2. Repetir la operación con otra cuerda, pero justo sobre los senos, a no ser que se emplee una sola cuerda para todo.
-Wey me vas a ahorcar, ve por donde te pasas, porque esta cuerda me esta ahorcando.
-Es que estas instrucciones no estan muy claras y esto ya no esta siendo divertido.
Oyeme cuando te digo que esto va a valer madres. Jaja, y si te amarro y te dejo aquí para que salgas en de a peso?
-Eres un pendejo, deja de reirte que ni hacer un nudo sabes.
3. Doblar la cuerda 3 y pasarla bajo las otras entre los senos, cruzándola una o dos veces y luego llevarla hacía la espalda formando una V. Tensar la cuerda a fin de sostener y erguir los senos. Anudar nuevamente la cuerda a la espalda, pero no sobre la columna vertebral.
4. La presión mantenida sobre los senos, los irá haciendo cada vez más sensibles, junto con la estimulación de los puntos del shiatsu.
Le parecía tan “kinky” que la sola idea de verse con un látigo, la hacía fantasear.
Pedro también era nuevo en el tema, a el no le emocionaba tanto pero pensaba que al fin y al cabo era coger y seria una buena historia que contar en alguna peda.
María odiaba planear las cosas, siempre trataba que sus encuentros sexuales fueran espontáneos porque así era más divertido. Sólo bastaba con llamar alguna noche entre semana y pedir verse con el plan de tomar unas chelas y los dos ya iban sabiendo lo que pasaría.
Luna llena y los estragos de la misma hicieron que no se pudiera contener a hacer la llamada.
-Que paso?
-Oye pedro, que vas a hacer al rato, porque no salimos por unas chelas, ya te toca dar tu tanda…
-Pues, estaba jugando x-box, pero va. Es luna llena verdad?
-No tienes ni que preguntar, nos vemos a las 10.
SHINJU – Las perlas
3 cuerdas cortas o una larga y una corta
1. Envuelve el tórax con una de las cuerdas, bajo los senos, manteniendo una presión constante. Anuda la cuerda en la espalda, a la izquierda de la columna vertebral.
2. Repetir la operación con otra cuerda, pero justo sobre los senos, a no ser que se emplee una sola cuerda para todo.
-Wey me vas a ahorcar, ve por donde te pasas, porque esta cuerda me esta ahorcando.
-Es que estas instrucciones no estan muy claras y esto ya no esta siendo divertido.
Oyeme cuando te digo que esto va a valer madres. Jaja, y si te amarro y te dejo aquí para que salgas en de a peso?
-Eres un pendejo, deja de reirte que ni hacer un nudo sabes.
3. Doblar la cuerda 3 y pasarla bajo las otras entre los senos, cruzándola una o dos veces y luego llevarla hacía la espalda formando una V. Tensar la cuerda a fin de sostener y erguir los senos. Anudar nuevamente la cuerda a la espalda, pero no sobre la columna vertebral.
4. La presión mantenida sobre los senos, los irá haciendo cada vez más sensibles, junto con la estimulación de los puntos del shiatsu.
-Y si crees que esta madre sirva? Digo, no se si tu has experimentado antes, pero si vas a quedar asi de inmóvil como dice el manual pues que chiste.
-Sabes que, callate y cogeme. Ya me tienes hasta la madre.
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